Sisley es una de esas marcas que conquista rápidamente por méritos propios. Cuando buscamos productos de calidad, con una formulación natural y con una investigación detrás para respaldar sus resultados, sin duda, ésta es una firma a la que acudir. Yo la conozco desde hace poco tiempo, algo así como un año, pero desde entonces, siempre que he podido hacerme con unos ahorrillos, he aprovechado para invertir en alguno de sus productos.
Conocí Sisley a través de las presentaciones de la marca que hacen en Sephora. Periódicamente, una chica de Sisley pasa por la tienda y bien te maquillan o bien te hacen tratamientos de cabina siempre explicando todas las propiedades y características de los productos de la marca. No te obligan a realizar una compra, pero después de todo lo que te cuentan, lo difícil es resistirse y si no fuera porque la marca no es barata, habría caído con muchas cosas más.
En el último tratamiento de cabina que acudí, le expliqué a la chica que me preocupaba el brote de acné que había tenido y del cual me estaba recuperando. Pensaba que podía haber sido al estrés del trabajo y ella me recomendó una serie de productos que podrían adaptarse a mi piel. Entre ellos, el que más me llamó la atención porque no tenía nada parecido buen el tratamiento D-Tox botánico.
El conocido como D-Tox en Sisley se trata de una crema muy ligera que se aplica por las noches durante un mes seguido para realizar una cura de desintoxicación de la piel. La chica me explicaba que normalmente se usa 2 veces al año cuando pasemos por épocas de estrés en las que nuestra piel puede sufrir y también antes de un periodo en el que queramos que nuestra piel luzca radiante, como por ejemplo antes de Navidad. Me pareció muy buena idea ya que en Junio sabía que por trabajo iba a tener mucho estrés y pocas horas de sueño y podría comenzar mi primer mes de tratamiento y así dejar para noviembre el segundo mes y tener una piel bonita en Navidad para las fiestas.
El envase contiene 30 ml que se supone que es lo indicado para los 2 meses de tratamiento al año. Yo de momento solo hice un mes de tratamiento en Junio y, como el envase no es transparente, no veo la cantidad que me queda. Lo que sí es cierto es que con poca cantidad de producto da para todo el rostro así que creo que en realidad me va a sobrar producto.
Sobre este tratamiento nos indican en el envase: "Poderosa cura de noche de un mes enriquecida con extractos vegetales con propiedades desintoxicantes (pruebas in vitro y ex vivo). Se emplea en periodo de estrés y de cansancio intenso. Como tras una larga noche de sueño, BOTANICAL D-TOX refresca la tez al despertar. En 4 semanas, los trazos se reposan, la piel recupera su luminosidad y su energía. No comedógeno."
Tras el mes de uso en Junio yo no noté que mi piel se haya vuelto maravillosa, pero sí que tuve el resultado que buscaba, que era que mi piel no se resintiese tras un mes duro de trabajo y poco sueño. No puedo afirmar que esto se debió al tratamiento D-Tox, claro está, pero para mí fue suficiente para darle el aprobado y considerar volver a usarlo de cara a la Navidad. Veremos si ahí, partiendo de condiciones normales antes y después del tratamiento, pueda notar algún cambio significativo.
Uno de los mayores puntos a favor de la marca Sisley son sus formulaciones a base de productos naturales. Es lo que más me gusta de su cosmética y más aún de su maquillaje. La chica de Sisley me explicaba también que la marca prefiere gastar el dinero en investigación y desarrollo que en hacer unos packagings llamativos o con más cambios en el diseño. Es algo que también me parece positivo ya que, aunque nos dejemos llevar muchas veces por el packaging, no hemos de olvidar que lo que importa es el contenido, y más aún si hablamos de cosmética.
La parte negativa que le veo a este tratamiento es el precio ya que no es demasiado asequible. En Sephora cuesta 139,60€ y con un descuento del 20% que tenía me quedó en 115,37€.
¿Habéis probado el tratamiento D-Tox de Sisley?, si no es así ¿lo probaríais?
¿Qué os ha parecido?
A mi esta marca me encanta! Besos!
ResponderEliminarDe verdad que sí!. Me encantaría poder probar más cosas con el tiempo. Tendré que ahorrar un poquito jeje. Besosss
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